Tras ya tener decidido que la tecnología Fintech sería la herramienta para poder tener la contabilidad actualizada, y en concreto, la descarga automática de movimientos bancarios, estuvimos investigando, tanto Marta como yo, una gran variedad de softwares que tuvieran implementado esta tecnología.
Lo cierto es que poco pudimos encontrar relacionado con el sector de la Administración de Fincas. Lo ideal sería que un mismo programa nos diera soporte tanto a contabilidad, como a propietarios, proveedores, juntas, incidencias, etc. Reconozco que prácticamente había tirado la toalla a que una sola aplicación nos proporcionara todas nuestras necesidades. Por ello, ya estaba pensando en cómo poder conectar, en el caso que utilizáramos varios programas, toda la información que obtuviéramos por separado.
Queríamos pensar en el propietario, darle todo lo que demandaba de una forma continua y actualizada:
- Saldo de sus propiedades.
- Saldo de la comunidad.
- Importe de la morosidad.
- Detalle de los Gastos.
- Balances de Ingresos de Gastos.
- Aviso de convocatorias y próximos recibos.
- Acceso a toda la información de la comunidad: contratos, actas, CIF, etc.
Pero claro, no podíamos manejar internamente toda esta información de un modo caótico, ya que en este caso nos faltarían manos para gestionarla previo a distribuirla a todos los propietarios. Aún recuerdo perfectamente el día, era dos de agosto de 2017. Iba como todos los días al despacho para empezar la jornada. Tengo la costumbre de escuchar la radio para estar bien enterado de las noticias. Muchas veces se complica la jornada de trabajo, y ya no puedo acceder un rato a las noticias de TV, prensa o radio.
Sería antes de las 8:00 horas, ya estaba pensando en todo lo que tenía previsto hacer durante el día. Suelo aprovechar estos momentos no solo para programar mi agenda sino también para programar las tareas más importantes que tiene que hacer Marta. Iba sumergido en mis pensamientos cuando de repente, una noticia por la radio llamó mi atención.
Se anunciaba la salida al mercado de un nuevo software para el sector de la Administración de Fincas. Comentaban que era fácil de usar, e incluso que a través del móvil podrían administrarse las gestiones referentes a un edificio.
El momento crucial, fue cuando en esta cuña, creo que no duro más de 20 segundos, anunciaban que este programa estaba orientado al propietario. Parecía un programa hecho a medida para todo lo que durante este largo tiempo estaba buscando. Enseguida saque mientras conducía un boli y papel de la guantera de mi coche, y me apresuré a apuntar el nombre del software, se llamaba Fynkus.
En el momento llegué al despacho, ansioso como ningún día, encendí mi ordenador y puse inmediatamente la plataforma en mi buscador. Al instante, ya estaba en la web, navegando para conocer al detalle este nuevo programa.
No podía creerlo, todo lo que tantas veces había pasado por mi cabeza y la de Marta, e incluso habíamos escrito como objetivos a cumplir, quedaba solucionado en su mayor parte por Fynkus. A veces pienso, que este programa cambió el rumbo de mi carrera profesional como Administrador de Fincas.
Estuve investigando hasta las 9:00 de la mañana que llegó Marta. En cuanto la oí entrar me levanté y apresure a la puerta. Le dije: “Marta,¡lo he encontrado! Fynkus tenía habilitado la descarga automática de movimientos bancarios. Con esta herramienta podíamos optar a conseguir todos nuestros objetivos. De una manera automática, y a través de una app en el móvil, el propietario tenía a su alcance toda la información.