Mantener la casa caliente durante todo el invierno con las subidas del gas y la luz, ciertamente se convierte en una tarea complicada, porque a final de mes llegan los cargos de la luz y en ocasiones, los apuros económicos. Para que esto no suponga un problema, desde el portal de administrador de fincas os traemos unos consejos para que podáis ahorrar costes:
–Exprime el aire del conducto de los radiadores cuando comience el invierno, porque suele acumulan burbujas de aire que impiden el paso del calor, lo que produce que no caliente con toda la potencia requerida.
-Busca la temperatura confortable para tu bienestar y evita las subidas de grados que suponen un gastro extra. Lo ideal son 21 grados para calentar un hogar. Según aconsejan los profesionales, con un termostato es más sencillo mantener una temperatura óptima durante todo el día y puedes ahorrar hasta entre un 8 y un 13% de tu consumo.
-Escoge una hora orientativa a la que sueles llegar a casa y un poco antes programas el encendido de la calefacción para que cuando entres al hogar esté caldeado el ambiente y puedas prescindir de ponerlo durante horas.
-Cierra las puertas de las habitaciones en las que no sueles entrar habitualmente para que el calor se concentre en el comedor y en las zonas comunes de la casa. De esa forma, puedes ahorrar el gasto de una energía innecesaria.
-Sustituye tu caldera por una que sea de menor consumo, más eficiente, como las de cogeneración, por ejemplo. Es cierto que suponen una inversión más elevada pero merece la pena por su reducción del consumo y del importe en la factura. Verifica si en la comunidad de propietarios existe un plan Renove de calderas y si es así, siempre puedes beneficiarte de sus ayudas.
-No coloques ropa húmeda encima de los radiadores, ya que supone un gasto mayor y un desgaste de energía que hará que aumente tu factura.
-No olvides apagar la calefacción durante la noche y en caso de que vayas a salir de casa, baja la temperatura, excepto en momentos de frío extremo en los que la necesites.
Asimismo, otra forma de rentabilizar el uso de tu caldera o calefactor es comparar diferentes ofertas que ofrece el mercado para escoger la que mejor se ajuste a tus hábitos de consumo. En este sentido, es importante tener en cuenta que algunas compañías eléctricas ofrecen tarifas especiales para adaptar el gasto a los diferentes tipos de consumo.